Una de las lesiones más comunes en corredores es el esguince de tobillo. Si bien es claramente conocido que los malos movimientos pueden provocar lesiones en rodilla, pies y tobillos, el esquince de esta ultima articulación es uno de los mas populares.


Cuando pensamos en un esguince de tobillo, consideramos que la importancia de la lesión nunca es igual, ni se desarrolla de la misma manera en todos los deportistas; sin embargo es muy conocido que las características de la misma son en términos generales comunes a todos los individuos y la forma de prevenirla también. Un esguince se produce cuando existe una rasgadura, distensión o estiramiento excesivo de algún ligamento.
Los detalles
En la zona de las articulaciones inferiores, donde se encuentra el tobillo, el aparato ligamentario tiene el control de todos los movimientos relacionados con el pie, este aparato regula los movimientos fisiológicos pone los límites cuando se exige a los ligamentos más de lo que un pie puede soportar. El tobillo sufre un esguince cuando los ligamentos se estiran exageradamente esto se produce cuando el pie es exigido en una mala pisada, una sobre exigencia, un mal precalentamiento de los músculos o al exigir la articulación frente a la falta de costumbre de una actividad. El esguince puede ocurrir al correr o al caminar sobre terreno desparejo como césped o al realizar malos movimientos de pisada durante la carrera. Por todo lo dicho, entrar en calor antes de realizar cualquier movimiento de carrera es muy importante, ya que nos permite preparar la flexibilidad de los ligamentos para el ejercicio. Según la gravedad de la lesión los esguinces son clasificados de grado uno, dos, o tres. Los de grado uno se clasifican de esta manera cuando se presenta una distensión parcial del ligamento; en el grado dos en la lesión existe una rotura parcial o total del ligamento; en los esguinces de grado tres la lesión es muy importante ya que se presenta una rotura total del ligamento con arrancamiento óseo. La única forma de recuperación de este ultimo es con intervención quirúrgica, en el de grado uno, la recuperación es posible con tratamiento de fisioterapia y en el grado dos se realiza tratamiento de fisioterapia o quirúrgico, en función de la lesión.
Recomendaciones
Es importante saber que un esguince puede producirse si el individuo practica deporte o no. Para prevenirlos al realizar actividad física es recomendable estirar el músculo antes de comenzar a correr, al hacer esto lo que en realidad esta realizando es “dilatar” el tejido que lo forma o el tendón que lo une al hueso en cuestión. El estiramiento siempre se debe realizar en forma relajada sin que el músculo llegue a doler. Es muy recomendable estirar antes y después de la práctica deportiva. Utilizar buen calzado para la firmeza del pie es un buen consejo al igual que intentar correr en terrenos parejos y no con muchas irregularidades. Aun tomando todas las precauciones muchas veces no es posible prevenir una posible lesión repentina de tobillos, sin embargo una buena entrada en calor puede ahorrarnos meses de recuperación.

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