Solo queda esperar
Tal y como teníamos previsto
hicimos el último recorrido de sábado antes de los 101 kilómetros. Todo según
el orden que ya teníamos acordado para esta semana. Estuvimos: Pepi, Juan
Galindo, Paco, Pepín y yo. Antes de salir lo único que decidimos fue el sentido
de la marcha; al ser circular podíamos hacerlo en cualquier dirección. Optamos
por salir subiendo, o sea hacia la barriada de la Dehesa, así que subimos por
el polígono. El terreno está perfectamente transitable, aparte de que en la
mayoría de los tramos está asfaltado, en otros está hormigonado, exceptuando la
bajada por los pinos el resto está prácticamente pavimentado. La mañana apareció
fantástica para la práctica deportiva, nublado y sin frío, la temperatura estaba
en torno a los doce o trece grados, claro que con el paso de las horas esta fue
subiendo un poco. Era un recorrido relativamente corto por aquello de que le
hemos perdido el respeto a las distancias, y todo lo que no sean más de treinta
kilómetros nos parece salir a dar “un paseo”. Algo menos de dos horas tardamos
en recorrer los casi catorce kilómetros del recorrido. Como dije anteriormente
optamos por bajar por los pinos de la Dehesa, tuvimos que hacer unos metros de
carretera antes de pasar por el lateral del cuartel de La Legión; después de
subir hacia la Fuente de la Higuera, una de las numerosas fuentes públicas de
nuestro municipio, atravesamos el camino de los Contrabandistas hasta salir al
que lleva a Los Frontones y ya desde ahí y atravesando el Llano de la Cruz
subimos hacia Ronda por el camino, que ya no son caminos sino carreteras, de la
Fuente de Don Pedro y el Cuco.
En el pasado no muy lejano, este recorrido podía hacerse
en su integridad sin pisar ni un tramo de asfalto.
Comentamos los pormenores tomando
un café y un desayuno en el hotel Berlanga.
Ahora ya a esperar que pase la
semana. Llover no lloverá y parece que hará algo de calor. Sea como fuere esperaremos
al sábado, entonces sabremos con exactitud como nos encontraremos los cielos.
Mucha salud, kilómetros y a gastar
zapatillas.
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