12 de marzo...sin lluvia.


 


Estábamos ante un fin de semana que se presentía muy lluvioso. Parecía que íbamos a sacar las canoas para poder transitar. Aunque el sábado no era precisamente el día que más lluvia se presagiaba. Bueno, el caso es que aparte del frío que hacía, la lluvia no apareció en ningún momento.

Un total de diez compañeros estuvimos en la mañana del sábado: Juanma, Paco, Paco Lora, Fran Balbuena, Pepín, Ana Rosa, Belén, Ana Jesús, Julián...que nos alcanzó un poco más tarde, y yo.

El viernes sí que estuvo lloviendo, no es que fuese una exageración, pero pensamos que sí que fue suficiente para que el campo no terminara de absorber el agua y se formase bastante barro. Por esta razón decidimos de alterar el camino que teníamos previsto recorrer. De hecho, lo cambiamos por completo y casi que fuimos improvisando por donde tirar. Lo que sí hicimos fue la primera parte, o sea salir en dirección hacia el polideportivo bajando por el polígono para llegar a la Toma y subir por la cuesta de La Pastora hasta el cerro del mismo nombre. Pasamos los Llanos de Aguaya hasta llegar a la bifurcación de pilar de Coca, pista de avionetas y Lifa. Hasta aquí mantuvimos la opción que teníamos prevista para este sábado. Al llegar a este punto nos dirigimos hacia el pilar de Coca con la intención de bajar por el camino del Capitán hasta el Patronato. Por decisión unánime bajamos hasta la carretera del Burgo. Paco Lora, Pepín y Paco iban por delante ya que iban más rápidos que el resto y ya habían iniciado la bajada por el camino del Capitán, se volvieron y juntos bajamos todos hasta la finca de Conrad, bodega que está situada a la salida del carril en el mismo borde de la carretera. Aquí se produjo la primera escisión del grupo ya que Paco y Pepín volvieron hasta Ronda por la carretera. El resto hicimos varios metros por la carretera para seguir por el camino del Cordel de los Pescadores hasta llegar al paso a nivel junto al cortijo de Los Aguilares. Aquí hicimos nueva “separación” del grupo. Paco Lora, Julián, Ana Rosa y yo nos vinimos por la vía del tren, como Paco y Julián fueron más rápido que nosotros dos, desconozco si siguieron paralelos a la vía, nosotros al llegar a la altura del pozo decidimos de ir por el camino de los Pinos ya que por la vía había un barro muy pegajoso y resbaladizo, así que elegimos este camino que sabíamos que al menos barro no encontraríamos, así llegamos hasta la Partida de Santa María y desde ahí hasta casa subiendo por la avenida de Málaga. Nosotros completamos un recorrido de casi 18 kilómetros.



El resto del equipo continuaron la marcha bajando hasta el puente de La Ventilla para continuar por el cortijo de La Fatiga hasta la finca El Bombero, bajando Carpía llegaron a Arriate. Deduzco por las fotos que recibimos en el grupo que pararon a desayunar en el bar El Chozo en Arriate. Me da la impresión que la subida la hacen por el camino del Nador, que es el que está paralelo al de Laura hasta el campin El Cortijo y terminar subiendo por la Laguna de Espejo hasta la Partida de Santa María hasta llegar al polideportivo. Así por encima supongo que serían unos 26-27 kilómetros. Las fotos que entre todos hicimos están el ese enlace à FOTOS

Y esto fue todo por esta semana. Para la siguiente ya veremos porque presuntamente también va a llover. Pero eso será en siete días. Hasta entonces, sed felices y disfrutad la vida.

Salud, kilómetros y a gastar zapatillas.

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