¡¡Plaza para los 101 Km.!!...Acinipo lluvioso
Voy a empezar cronológicamente la entrada del fin de semana,
o sea por el sábado, que a las 9:45 de la mañana estábamos preparados con los
portátiles, ordenadores, computadoras, tablets, teléfonos móviles y toda clase
de artilugios con conexión a internet, con la mirada fija en la pantalla, el
código de cada uno ya pegado en la casilla correspondiente y los dedos
preparados para comenzar a aporrear la tecla de intro todas las veces que fuese
necesario hasta que el cuadro de diálogo se pusiese en verde….señal de que
había entrado….faltaban segundos para las diez y comenzamos el ritual…una vez,
aun no….otra vez….aun no…otra vez ¡¡¡¡bingo!!!!....¡¡el mío ha
entrado!!...rápido…pega otro ¡¡también está!!....y en tan solo 18 segundos las
2700 plazas estaban agotadas, de nuestro grupo hemos pillado la plaza casi
todos y los que no están muy cerca de conseguirlo, así que un año más a partir
de ahora comenzamos la vuelta atrás, a gastar zapatillas por esos carriles.
Y el domingo….el domingo Acinipo, dos modalidades de
carrera, un maratón de montaña….o sea 42 kilómetros y otra más corta de 21
kilómetros, todo por montaña, un recorrido precioso saliendo desde el
polideportivo de la Dehesa y bajando por los pinos del parque Periurbano hasta
la Fuente de Don Pedro y el Llano de la Cruz subida por la Amarilla hasta
llegar a La Portuguesa y bajar hasta el carril del Cordel del Puerto el
Quejigal al Puerto el Monte, allí se dividieron las dos modalidades, una se fue
hacia la izquierda para dar la vuelta por las ruinas de Acinipo y subir por
Charco Lucero hasta nuevamente el carril anterior mientras la otra se fue para
la derecha hacia el carril que lleva al Bigote de la Zorra, últimos 10
kilómetros que fueron los mismos para las dos modalidades bajando nuevamente La
Amarilla y subiendo por el mismo recorrido de salida.
Varios meses llevaba sin llover y Zeus se acordó de nosotros
y decidió que había que recuperar el tiempo perdido así que varios días antes
comenzaron a anunciar que el domingo llovería…y llovió….vaya si llovió, pero
está demostrado que el personal no le teme a nada, como si tal cosa todos los
corredores se presentaron en el polideportivo para tomar la salida a las 10:00,
por parte nuestra contábamos con 14 miembros, tan solo faltó uno por enfermedad….pero
los demás allí estaban todos, sin miedo al agua. Con buen criterio hicieron el
cajón de salida desde dentro del recinto y a la hora acordada se pusieron todos
en marcha, nosotros por nuestra parte…Anita, Ana Rosa y yo, ya estábamos en el avituallamiento
del Bigote de la Zorra desde las 8:30 montando todo el tinglado para que los
corredores tuviesen su agua….¡¡qué ironía…agua!!....bebida isotónica y algo de
comida en forma de barrita energética.
El cielo estaba completamente cubierto
pero la lluvia solo era un fino chirimiri, en menos de una hora se presentó en
nuestro puesto el primer corredor de la modalidad corta, y a partir de ahí ya
fue un continuo pasar de corredores, seguía cayendo una fina lluvia sin llegar
a ser aguacero, apenas había pasado el último corredor de la modalidad corta
cuando ya pasó el primero del maratón y a partir de entonces comenzó a arreciar
la lluvia convirtiéndose ya en una precipitación de verdadera importancia y no
dejó de hacerlo ya en toda la mañana. Llega a ser verdaderamente sorprendente
el aguante de las personas en situaciones casi extremas haciéndolo por voluntad
propia.
Pasaron todos nuestros componentes con gran algarabía por
parte nuestra cada vez que llegaba alguno, los primeros se libraron de la
lluvia más intensa pero los que venían de hacer la distancia más larga llegaron
ya empapados. Lo más importante es que todos llegaron a meta…y mejor aún,
nuestra compañera Pepi obtuvo un premio al quedar segunda en su categoría al
igual que Paco López que también se subió al cajón quedando igualmente segundo
de su categoría, enhorabuena para los dos en particular y para todos nuestros
componentes en general.
Felicitar a todos los participantes por la entrega dedicada
en esta prueba ya dura de por sí y acrecentada por las inclemencias del tiempo
que se presentaron ayer que la convirtieron en más dura aún si cabe, igualmente
a la organización por las mismas razones y que año tras año van convirtiendo
Ronda en cita obligada para maratones de montaña, a los voluntarios que
estuvieron aguantando estoicamente en los puestos…y por supuesto….a Anita y a
Ana Rosa…por la labor desarrollada en el Bigote de la Zorra y que viví con
ellas intensamente….enhorabuena para todos.
¡¡Comienza nuestra particular cuenta atrás!!...más que nunca….salud
y kilómetros y a gastar zapatillas.
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