8 de febrero, fantástica mañana.
Casi me dan ganas de comenzar por
el final en el día de hoy; pero mejor no, comienzo por el principio como es lo
lógico.
Amaneció algo nublado, sin intención de llover. A las siete comenzamos
a reunirnos y a las siete y media ya teníamos formada la alineación de esta
jornada, a saber: Belén, Montse, Julián, Mari Carmen, Paco, Pepi, Fran
Balbuena, Katy, Laura, Moya, Ana Jesús, Antonio Vargas, Juanma Becerra y yo.
Muy concurrida la mañana para una bonita y larga ruta. La intención, tal como
hicimos, era partir en coche hacia el Puerto El Monte, lugar donde se encuentra
el límite de las provincias de Málaga y de Cádiz, para iniciar la ruta desde allí
mismo. Ya completamente de día llegamos hasta el lugar especificado y allí nos hicimos
la primera de las fotos antes de ponernos en marcha. Lo hicimos siguiendo la Cañada
Real de Osuna en dirección a la carretera de Setenil a Cuevas del Becerro. Este
es un camino bastante ancho y de firme bastante regular y prácticamente llano,
bastante seco, con algún que otro charco disperso, debido a la escasez de
lluvias en las últimas semanas; atravesamos la carretera y seguimos la
misma vía pecuaria hasta el cortijo del Cucadero y una vez pasado nos desviamos
hacia la izquierda para tomar el Cordel del Camino de Málaga. Atravesamos la
parte que se conoce como Los Toriles, esta zona debe su nombre a la casa que
está situada a la derecha según la dirección que llevamos. Aparecimos en la
rotonda que se dirige hacia Alcalá del Valle, Setenil y algún que otro camino
rural. Por el camino que discurre paralelo a la carretera llegamos hasta el
colegio de Setenil y después de atravesar el puente sobre el río Guadalporcún
accedimos a la ruta del Bandolero, La leyenda romántica de estas tierras está
ligada al bandolerismo. Los caminos y encrucijadas que parten o llegan a esta
ruta se ubicaban en pleno bosque de encinas, quejigos, alcornoques y un
frondoso matorral de jaras, tojos y tomillos, convirtiéndose en el escenario
ideal para los míticos bandoleros que habitaban estas tierras. Un paisaje increíble
nos lleva hasta la zona más boscosa y donde tenemos que atravesar el río. Al no
llevar un gran caudal de agua no nos fue difícil de atravesarlo, en parte
también gracias al pontón que aun se conserva de pasadas ediciones de los 101
kilómetros ubicado por los miembros de la Legión. Una vez pasada toda esta zona
llegamos al cortijo de Calle, en este sitio desaparece gran parte de la
arboleda dando paso a un terreno más de cultivo. A la derecha podemos ir
observando en todo momento la meseta de Ronda La Vieja, este yacimiento
arqueológico alberga los restos de la ciudad romana de Acinipo, asentada sobre
un antiguo "oppidum" o ciudad fortificada ibérica, que, a su vez,
hunde sus raíces como lugar de ocupación en la Prehistoria.
Iniciamos la subida hacia la zona
que delimita con el cortijo de Charco Lucero, una subida bastante pronunciada
con el terreno bastante irregular, a la derecha se encuentra el cortijo de Chinchilla,
una vez llegados a la entrada de dicho cortijo podemos decir que prácticamente
hemos llegado al fin de la pendiente. Salimos al camino de va desde el puerto
El Monte al puerto El Quejigal; este camino ya lo hicimos la pasada semana. En
esta ocasión lo hicimos en el sentido contrario que llevamos entonces, o sea
que una vez salidos al camino nos dirigimos hacia el puerto El Monte. A unos
tres kilómetros aproximadamente se encuentra el cortijo El Polear, lugar de obligada
parada para rellenar los botes de agua del pozo que allí se encuentra. Se dice
que este pozo se encuentra en el término municipal de Setenil y el propio
cortijo que se encuentra enfrente pertenece al término municipal de Ronda, por
lo que el camino va marcando la linde de ambas provincias. Ya solo nos quedaba
bajar la cuesta que nos lleva nuevamente al punto de partida, o sea al puerto El
Monte, donde un rato antes habíamos iniciado la marcha.
Como colofón y fin de la ruta,
Juanma y Belén nos ofrecieron un desayuno espectacular. Hubo de todo, desde
café hasta cerveza, chorizo, morcilla, chicharrones, aportados por Laura, carne
de membrillo por Ana Jesús, queso, lomo en manteca...todo un sinfín de viandas
para recuperar las calorías quemadas durante la mañana. Una mañana genial en todos
los sentidos. Hicimos muchas fotos que están en el siguiente enlace à FOTOS
Ya está abierto el plazo del
Homenaje a la Legión, en la anterior entrada ya di algo de información acerca
de la misma. Pinchando este enlace podréis encontrar toda la información
respecto a la misma. HoLe2020
El miércoles nueva ruta para el
sábado.
Hasta entonces, salud, kilómetros
y a gastar zapatillas.
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