Un esperado regreso


Un esperado regreso.
Hace unos meses esta humilde persona escribía en este blog dando ánimos a un amigo que estaba pasando por un momento, no difícil, si no que bastante duro.
Siempre me puse en lo peor, porque fueron meses muy duros, que aunque físicamente no estuve a su lado, intentaba darle todo mi ánimo y todo mi apoyo posible. Siempre lo tuve en todo momento en mi pensamiento, porque lo único que deseaba que tuviese una pronta recuperación.
Ha sido mucho tiempo de sufrimiento, de dolor y de angustia pero lo bueno de todo, que eso ya quedó en el pasado.
Todavía recuerdo como si fuera ayer el día que me dijo q todo acabó, que estaba curado, y yo conteniéndome las lágrimas de alegría por escuchar esas maravillosas palabras, le pregunté que qué tal sentía después de todo y que iba a hacer, a lo que él me respondió con una fantástica sonrisa… “VIVIR, CRISTINA, VOY A VIVIR Y NO PERDER UN SEGUNDO DE MI VIDA”. Yo entré en el gimnasio y él se fue, y no pude aguantar más y rompí a llorar, me dio una gran lección en ese momento.
Es increíble que a veces tenemos q pasarlo mal para valorar todo aquello que tenemos a nuestro alrededor.

A pesar de que la vida nos ponga pruebas y retos difíciles, con voluntad, coraje y esperanza podemos llegar a superarlos. No podemos quedarnos estancados, no podemos flaquear ante las dificultades, hay que VIVIR y SOBREVIVIR, demostrarnos que si nosotros queremos y ponemos de nuestra parte, todo se consigue.
Y fíjate si se puede conseguir, que volver a verlo montado en una bicicleta de spinning para retomar de nuevo sus clases, fue la gran alegría y satisfacción que me llevé ayer.
Todos sus alumnos llenaron esa sala por su gran regreso, si él estaba nervioso por volver, nosotros estábamos impacientes porque volviese, creo que para todas aquellas personas que estábamos allí fue una gran alegría, y por qué no decirlo, todo un lujo.
Y no me entretengo más puesto que ya no me salen más palabras, pero sabes, y ahora si te hablo en primera persona y dirigiéndome a ti, Abel, que para mí has sido todo un campeón y un luchador, que me has demostrado mucho en todo este tiempo,
que me has dado muchas lecciones aunque no lo creas y porque volver a tenerte en el gimnasio es todo un placer, un orgullo y una inmensa alegría.
En nombre de mi peña A Las 7 En EL Bar y sobre todo en el mío propio, queremos trasmitirte nuestra alegría por tu recuperación y por tu vuelta al mundo del deporte.
¡¡Muchos Besos!!


                                                                                                          Cristina Badillo Gil

Comentarios

Entradas populares de este blog

16 de diciembre

Vacaciones...activas.

Qué va a llover dicen...