Se acabó enero

 


Nos dijeron que haría frío y vaya si hizo frío el sábado. Después de la helada que estuvo cayendo durante toda la noche, la imagen que ofrecía la mañana era de una fina capa de hielo depositada en cualquier superficie y la temperatura no superaba los cero grados.

Aunque a mí personalmente no me guste el invierno, reconozco que tal vez sea más fácil quitarse el frío que el calor. A pesar de la gélida mañana que hacía, nos presentamos Belén, Juanma, Pepín y yo. Dimos unos minutos de cortesía por si a alguien se le habían pegado las sábanas y en vista de que no apareció nadie más nos pusimos en marcha a ver si conseguíamos entrar un poco en calor. Efectuamos la ruta más larga que teníamos prevista para esta ocasión. Nos dirigimos hacia la Partida de Santa María pasando por el Olivar de las Monjas y el polideportivo...o lo que queda de él. Ya una vez salidos de lo que es la ciudad propiamente dicha, incluso pasada la Cañada Real y salimos a campo abierto la temperatura era aún más baja, seguro que estuvimos varios grados por debajo del cero. Impusimos un buen ritmo, casi inconscientemente, con el fin de calentar pronto los cuerpos. Bajamos por la Laguna de Espejo. El campo estaba completamente blanco a consecuencia de la helada, los pequeños charcos que había en el camino estaban completamente congelados y el vaho se hacia presente en la respiración de cada uno de nosotros. Así llegamos hasta el campin El Cortijo. Giramos hacia la izquierda, que aun sigue llamándose carril de Espejo y bajamos por el primer camino que no encontramos de frente en lugar de bajar por el camino de Laura, que es el que está más a la derecha, pero que a la postre nos llevan al mismo sitio que es Arriate. Como hacía tanto frío decidimos de hacer una paradita en el bar El Chozo para tomar un café que nos transmitiera un poco de calor. Atravesamos la población hasta llegar al río y comenzar a subir la primera cuesta considerable que haríamos hoy. Subimos por el camino del Marqués hasta el cortijo de Nepomuceno. Entre que ya hacía un rato que había salido el sol y el esfuerzo de la cuesta fuimos mitigando el frío. Aquí nos fuimos a la izquierda para bajar por el camino de Ronda o Los Frontones como lo conocemos mejor. Así llegamos hasta el Llano de la Cruz que seguimos de frente para llegar a la casa de Los Padres Naranjos donde iniciamos la segunda cuesta respetable del día, la de la Fuente de Don Pedro. A mediación de esta pendiente ya nos desprendimos de alguna que otra prenda de cuello y de guantes, incluso llegamos a terminar destilando sudor. Completamos un total de 17,5 kilómetros y ni que decir tiene que pasamos una mañana muy agradable.



Las fotos de la jornada están à AQUÍ

Al término y como siempre nos fuimos a tomar el desayuno al hotel Berlanga donde se nos unió Fran Balbuena y Katy y estuvimos un buen rato de charla.

Y esta fue la jornada de la última salida del mes de enero.

Comentar que el Homenaje a los 101 kilómetros de este año se celebrará el día 25 de marzo. Es lo único que puedo adelantar ya que la información al parecer está en el Facebook del Patronato Municipal de Deportes de Ronda. Buscaré información por otro lado e iré dando detalles.

El próximo miércoles volvemos a adelantar una nueva salida para el sábado.

Salud, kilómetros y a gastar zapatillas.

  

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